El ser humano es libre y es capaz de decidir entre hacer el bien o no hacerlo. Además, la lucha entre teoría y práctica también se produce en el corazón humano.
No siempre saber qué es lo correcto es motivo suficiente para hacerlo, como bien muestra el hecho de las excusas que puede ponerse una persona a sí misma para no hacer lo correcto por orgullo, vanidad, soberbia o cualquier otra razón.
1. En primer lugar, hacer el bien es un hábito constructivo para tener una vida feliz.
2. La práctica del bien es tan gratificante que incluso es un remedio para prevenir la depresión, el estrés y la ansiedad.
3. Las relaciones personales son mucho más saludables y fluyen mejor desde la bondad del corazón marcado por los buenos deseos y las acciones bondadosas.
4. El bien funda la empatía, la solidaridad y la autoestima.
5. Existen personas que cuando tienen algún tipo de remordimiento de conciencia o de preocupación no pueden conciliar el sueño por la noche. Hacer el bien te ayuda a tener la paz interior suficiente para descansar cada noche.
Hacer el bien mejora el estado de ánimo, aumenta los niveles de ilusión y alegría.
6. Ve el lado positivo de las cosas. El lema de los Christophers dice: “Es mejor alumbrar con una sola vela, que maldecir a la obscuridad.” Sé esa luz. Cuando veas controversia, se la persona que cambia el tema sugiriendo una solución. No digas lo que tu harías, haz que todos participen.
7. Acepta a todos a tu alrededor como tus hermanos y hermanas sin importar su raza, edad, orientación sexual o cultura. Admira que todos tenemos sentimientos y debemos de ser tratados con respeto.
8. No intentes corregir a las personas cuando estén enojadas diciendo algo irracional, solo míralos con compasión y quédate callado. Decir “yo entiendo” generalmente es la respuesta equivocada. Si vas a decir algo, di algo como, “lamento que te sientas así, ¿hay algo que pueda hacer por ti para ayudar?”
9. Deja de compararte con los demás.
Comparándonos con otros, estamos perdiendo el tiempo y la energía que podríamos estar usando para desarrollar nuestra persona. La vida real se encuentra utilizando nuestros talentos y dones en vez de estar enfocándonos en los dones de alguien más.
10. Aprende a escuchar mejor de lo que hablas. Escucha atentamente lo que la persona dice y reconoce lo que dice con una pregunta acerca del tema que esta hablando, sabrán que estas prestando atención a lo que dicen.
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